Capítulo 1 – Las entrevistas

Uno de los formatos más conocidos y peor practicados.

Unidad 1.1. ¿Qué es una entrevista?

La entrevista es uno de los formatos más conocidos y reconocidos por todos los públicos, más usados por periodistas en todos los medios de comunicación y que, generalmente, se clasifica dentro del periodismo de opinión.

En una emisora podríamos prescindir, tal vez, de otros formatos. De las entrevistas no. Sin entrevistas, perderíamos la espontaneidad de la conversación, la fuerza del testimonio vivo, nos cortarían las raíces mismas de la participación popular, de la comunicación ciudadana que siempre es de doble vía.

¿Qué es una entrevista? Un dialogo basado en preguntas y respuestas. Como diálogo que es, la mayoría de las pautas que sirven para hacer fluida y amena una plática en la vida cotidiana, valen también a la hora de realizar una entrevista.

Pero la entrevista no es un diálogo así nomás. Implica un desequilibrio interno, exige que alguien sea quien pregunte y alguien quien responda. Esta relación entre quien entrevista y quien es entrevistado no se invierte ni se disuelve en ningún momento. Si así fuera, si el quien entrevista diera su opinión o comenzara a responder preguntas de quien es entrevistado, cambiaríamos de formato, pasaríamos quizás a una mesa redonda o a una tertulia. Esta distinción de funciones especifica el diálogo de la entrevista y pone en su puesto al entrevistador que quiera lucirse. Aquí, el protagonista es el entrevistado.

Preguntas y respuestas. Parecería fácil entrevistar. Y sin embargo, no lo es. Estamos ante uno de los formatos que requieren de más experiencia para lograr dominarlo. Con sabia picardía contestaba el periodista chileno Jorge Timossi a sus estudiantes cuando estos le preguntaban cómo hacer buenas entrevistas: Hacer antes muchas entrevistas malas.

Conclusión: practicar mucho y evaluar lo practicado, que es lo que se suele llamar experiencia. Aunque no seamos Carmen Aristegui, podremos llegar a hacer estupendas entrevistas.

Unidad 1.2. Tipos de entrevistas

En cada manual de periodismo aparecen diferentes clasificaciones para las entrevistas. Todas son sensatas. Y todas resultan incompletas, porque intentar agrupar los tipos de entrevistas, tan variadas como las conversaciones cotidianas, es más difícil que arrear conejos.

En medio de esta variedad, me inclino a hablar de tres grandes clases de entrevistas, tomando en cuenta el objetivo fundamental de las mismas:

Entrevistas informativas
Para obtener datos, completar informaciones, con protagonistas o testigos de los acontecimientos.

Entrevistas de opinión
Para conocer los argumentos, las valoraciones, los juicios y prejuicios sobre un hecho o situación.

Entrevistas de personalidad
También se llaman de semblanza. Aquí el tema es la misma persona que es entrevistada, su vida, su carácter, muchas veces el lado humano y cotidiano de autoridades o celebridades. (Pero, igualmente, podemos hacer estas entrevistas con una abuela que cuenta su vida, o con un cimarrón que cuenta sus fugas, o con los hijos de Sánchez). Se trata de hacer un retrato hablado de la persona entrevistada.

Las entrevistas también se pueden clasificar según sus integrantes:

Entrevista individual: Una persona entrevista y una es entrevistada.

Entrevista colectiva: Una persona entrevista y varias, juntas, son entrevistadas.

Encuesta: Una persona entrevista y varias, por separado, son entrevistadas.

Conferencia (o rueda) de prensa: Varias personas entrevistan y una es entrevistada.

Comencemos por la fórmula más frecuente, la entrevista individual, cuyas pautas de producción valen igualmente para todas las demás.

Práctica 1: Envía tus comentarios
¿Conoces otra clasificación de las entrevistas? Escríbenos y cuéntanos.
Cuéntanos también qué tipo de entrevistas has practicado en tu quehacer periodístico.

Unidad 1.3. ¿A quiénes entrevistar?

¿Vamos a hacer un debate? Invitamos al diputado, a la concejala y al licenciado. ¿Una entrevista? Llamamos al sociólogo, al obispo o a la doctora.

Así pasa con demasiada frecuencia. Y al final, es siempre un pequeño grupo de personas el que habla sobre todos los temas y en nombre de toda la ciudadanía.

¿A qué se debe esto? ¿Por el facilismo de los productores de llamar siempre a los mismos? Puede ser. ¿O para pavonearse ante las autoridades? Tal vez. ¿O porque creen que las autoridades y los intelectuales son las únicas “gentes pensantes”?

En cualquier caso, hay que superar esa “aristocracia del micrófono”. En radio, como en política, tenemos que practicar la democracia participativa.

¿A quiénes podemos entrevistar en nuestra emisora? A todos. A todas. A los de arriba y a los de abajo. A los de derecha y a los de izquierda. A nacionales y extranjeros. A viejas, jóvenes y niños. A especialistas y aficionadas. A presidentes, presididos y presidiarios, como canta Facundo Cabral.

A veces, imaginamos que si no es algo importante dicho por alguien importante, la entrevista no tiene valor. Desde luego, vamos a recoger la opinión de la técnica, del político y de los personajes públicos. Pero la vendedora informal, el minero relocalizado y el limpiabotas también tienen mucho que decir sobre la economía del país. Ellos y ellas hablarán del costo de vida con mejor “conocimiento de causa” que el señor ministro.

Que suenen todas las campanas del carillón, agudas y graves. En el conflicto de un centro escolar, los estudiantes tienen igual derecho a opinar que los profesores. En asuntos de medio ambiente, las campesinas y los indígenas tienen tantas o más razones que los colonos y las empresas. Así, escuchando distintos pareceres, las entrevistas se convertirán en un ejercicio de participación ciudadana, de democracia.

Que hablen y que lo hagan desde donde están. Ciertamente, podemos hacer entrevistas en el estudio y éstas nos saldrán con mejor calidad de sonido, sin ruidos, sin baches. Pero las que hagamos en la calle, en el bus, en el barrio, ya sean grabadas o en directo mediante la móvil o el celular, nos traerán una bocanada de palabra fresca, nos trasladarán con la imaginación al mismo lugar de los hechos.

Que la radio salga de la radio. Que quienes entrevistan no esperen a la gente, sino que vayan a su encuentro. Y que en nuestras entrevistas se escuchen todas las voces y se respeten todas las opiniones.

Práctica 2: ¿A quiénes entrevistas?

Revisa la lista de a quienes has entrevistado en esta última semana, en este último mes:

-¿cuántas autoridades o dirigentes y cuánta gente del común?
-¿cuántos políticos y cuánta ciudadanía de a pie?
-¿cuántos del gobierno y cuántos de la oposición?
-¿cuántos hombres y cuántas mujeres?
-¿algún niño, alguna adolescente, algún adulto mayor, alguna extranjera?

Práctica 3: ¿Y dónde entrevistas?

Revisa también los lugares desde donde haces tus entrevistas:

-¿cuántas en cabina?
-¿cuántas por teléfono?
-¿cuántas desde la calle?

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Capítulo 1 – Las entrevistas

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8 comentarios sobre «Capítulo 1 – Las entrevistas»

  1. Muy bueno el tema. En realidad una buena guía porque algunos entrevistadores se responden antes de preguntar. También debemos entender que la radio no está entre cuatro paredes, sino fuera de la misma.

  2. Muy valiosas las pautas compartidas hasta ahora , lo que mas me ha llamado la atención es ese llamado a salir de la cabina y llevar la radio, el micrófono a la gente. No esperar sentados tras micrófonos a la ciudadanía.

  3. Bueno, creoq ue coincido con los comentarios ya hechos. Yo he entrevistado a diferentes personas, autoridades civiles, comunitarias, ciudadanos y ciudadanas, profesionistas… en fin.
    Lo interesante que me resulta de esto, es que, muchas de las cosas que estoy leyendo en este curso, «errores», los cometo. Lo que me queda es, seguir practicando y tomar en cuenta las sugerencias, del curso. Animo y mucha suerte a todos los y las radialistas.

  4. Me gusta mucho leer la información que nos brindan. Me hizo pensar en lo que vengo sosteniendo desde hace tiempo, en que siempre son casi los mismos los enrevistados a dar opinión sobre un tema preciso. Yo sostengo que el que construye la realidad diaria de una comunidad es el propio vecino y en muchas ocasiones, el que verdaderamente está capacitado para contarnos sobre determinadas cuestiones del quehacer diario.

  5. Muy buen tema felicitaciones. por el curso, nos ayuda. mucho este material en lo personal. en Radio y es un aporte. para las entrevistas. que ahí realizamos.

  6. Este contenido me ayuda mucho, ya que suelo hacer entrevistas para tv, pero lo he echo en forma empírica, creo que a partir de estas lecciones empezaré a profesionalizar en cuanto a periodismo se refiere. Compartiré este curso con mis compañeros. Muchas gracias

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