La municipalidad utilizará aplicaciones libres y de código abierto como un paso previo a la migración.
Barcelona se suma a la lista de ciudades que optan por uso el software libre en sus administraciones públicas no solo como una manera de reducir gastos en licencias , sino como una apuesta por romper con la relación de dependencia que se genera con empresas como Microsoft.
En una nota al periódico El País, Francesca Bria, comisionada de Innovación Digital del Ayuntamiento de Barcelona, explica que «los fondos que vienen de los ciudadanos se tienen que invertir en sistemas que se puedan reutilizar y abrir a un ecosistema local». Es que Barcelona es la primera ciudad de España en sumarse Public Money, Public Code, una campaña europea que busca que el software desarrollado con recursos públicos sea libre y de código abierto.
Comenzar a utilizar aplicaciones libres, aunque corran en un sistema operativo privativo como Windows, es apenas el primer paso. El objetivo a largo plazo es migrar toda la administración del ayuntamiento de Barcelona a distribuciones libres como Ubuntu. Actualmente un grupo piloto de mil funcionarios ya está incursionando en el uso de GNU/Linux
De este lado del Atlántico no nos quedamos atrás. Por el contrario, America Latina es pionera en lo que a materia de software libre y administración pública se refiere. Ecuador, Brasil, Bolicia y Uruguay son algunos de los países se encuentran, en mayor o menos medida, impulsando políticas de migración.
Con avances y restrocesos, distintas administraciones públicas, tanto a nivel nacional como a nivel local, van impulsando proyectos que redunden en beneficio de la ciudadanía.