Miles de millones de dólares se gastan para rescatar y proteger la propiedad privada, pero poco o nada se invierte para garantizar la vitalidad de los bienes communes lo cual significa la protección de los recursos, equidad en el acceso y uso y control radicalmente democrático. Publicación de la Fundación Heinrich-Böll-Stiftung compilada por Silke Helfrich.
Genes, bytes y emisiones: bienes comunes y ciudadanía